lunes, 23 de diciembre de 2013

Crisis de la Seguridad Operacional en Chile

"Si acaso tú no levantas la vista para adelante, posiblemente creerás que eres el punto más alto a apuntar".

 
 Con esto deseo dejar reflejado, que por Dios, aún nos falta muchísimo camino por recorrer para que el país pueda alcanzar el nivel de Seguridad Operacional que ostentan actualmente otros países desarrollados en el ámbito Aeronáutico.

 
Se debe trabajar decididamente para crear una nueva y verdadera cultura aeronáutica en el país.

 
Al respecto, deseo ser muy responsable en mi visión y opinión de la Seguridad Operacional en Chile, porque estimo que ello pasa precisamente por una renovación urgente en la conducción de los Departamentos de la DGAC y permitir así poder construir en el mediano plazo una nueva cultura organizacional, que permita iniciar la construcción de los grandes cambios que se requieren. 

 
Para que ello pueda suceder, es necesario generar los cambios pertinentes de algunas autoridades aeronáuticas que actualmente ocupan puestos de jefatura y que lamentablemente no han estado a la altura de los nuevos desafíos que esperan los pilotos de este país o bien no han tenido la voluntad de generar los cambios urgentes que requiere actualmente la aviación.

 
Hace poco días atrás asumió un nuevo Director General de la Aeronáutica Civil, que tendrá en sus manos la  dura tarea de conducir a la entidad más importante de la aviación en Chile y que por cierto regula la actividad de la totalidad de los pilotos.


Existen muchos de ellos que se encuentran muy expectantes y ansiosos para comenzar a edificar el futuro que se avecina y esperan que en el breve plazo se comiencen a visualizar los primeros cambios que se adoptaran en la conducción de la Seguridad Operacional en Chile.

 
De verdad, es un anhelo que se comience a construir los nuevos pilares y cimientos de una organización tan prestigiosa como es la DGAC, y que permita generar los cambios necesarios para continuar engrandeciendo la aviación en Chile.

 
Sin duda, que hoy no basta con vanagloriarse con tener probablemente  una de los mejores Direcciones de Aeronáutica del Cono Sur. Se requiere por cierto, avanzar aún más rápidamente, para seguir creciendo y estar a la altura de la grandes Direcciones Aeronáuticas en el mundo global.

 
Definitivamente, se requiere en forma urgente una conducción moderna y comprometida verdaderamente con la Seguridad Operacional en el país, de modo tal que no es aceptable que sigan permaneciendo en los mismos puestos de conducción y de decisión, aquellas autoridades y funcionarios aeronáuticos, algunos ya con más de una década ejerciendo las mismas funciones. 

 
Es imperativo el tratar de buscar el rejuvenecimiento de la DGAC, con el propósito imprimirle nuevas ideas.

 
Asimismo, es también importante intentar producir o generar los cambios urgentes que se requieren para la Aviación en Chile y ello pasa definitivamente por contar con una normativa aeronáutica y una visión de la Seguridad Operacional moderna en Chile, orientada principalmente a brindar un apoyo efectivo a los usuarios del sistema aeronáutico y también la de facilitar el crecimiento de la Aviación General y TCAP en Chile.
 
La Seguridad Operacional es el resultado entre otras cosas de la capacitación que proporciona la DGAC. Sin embargo, los seminarios y charlas que se programan anualmente están muy lejos de los estándares que se aspira recibir de parte de los usuarios.
 
Sólo basta con apreciar la cantidad de Instructores de Vuelo que han perdido su habilitación de función en la última década, para poder verificar que la actividad está actualmente en crisis.
 
Desde afuera seguirán expectantes todos aquellos pilotos que aman la aviación y que desean seguir aportando con su experiencia y trabajo día a día para cooperar efectivamente al nuevo Director General que asumió, para que esta idea se pueda cristalizar y materializar algún día.

Entonces, primero se debe comprender que la DGAC requiere primeramente capacitar, luego se debe evaluar y finalmente se debe continuar reforzando a los usuarios del sistema aeronáutico.

Realmente, se aprecia que las prioridades y visión de Seguridad Operacional de la DGAC es actualmente muy pobre y ello se puede ver reflejado en que a la fecha no exista publicado en Chile ni siquiera un Manual de Instructor de Vuelo o un Manual de Vuelo por Instrumentos que permita instruir y capacitar a los pilotos de la aviación TCAP, TCAG y Aviación General.
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

2 comentarios:

  1. Estimado Juan Pablo,

    Concuerdo contigo en todo. Sin perjuicio de eso, creo que dejas fuera de tu análisis algo muy importante: nosotros, los usuarios.

    La seguridad operacional no mejorará si nosotros no mejoramos también nuestra autocrítica. El bajo uso del SARSEV es fiel reflejo de ello. Todavía existe algún obscurantismo a la hora de aprender de los errores propios o ajenos.

    Que útil sería un uso masivo del SARSEV, o una columna como la de la revista flying "I learn about flying from that day:..." en donde pudieramos leer y compartir metidas de patas propias o ajenas en pos de la seguridad.

    En ese sentido la iniciativa del IMC Club apunta hacia tal dirección.

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    1. Julio, sí sólo en parte estoy de acuerdo contigo, pero no olvides que es la autoridad aeronáutica la que debe crear las condiciones adecuadas y propicias para que la Seguridad Operacional, no sea una cacerías de brujas. Los usuarios del sistema aeronáuticos siempre le han tenido desconfianza a la DGAC y eso cuesta mucho cambiarlo. Por ello es que se requiere un cambio en la conducción de las políticas. Sí acaso se ha hecho poco en el tema, difilmente se hará lo que se requiere para avanzar más rápido los próximos años. El sistema similar al SARSEV en USA lleva funcionando más de 40 años, por ello se requiere además un cambio cultural, que lamentablemente con las autoridades actuales difícilmente se podrá lograr.

      Cordiales saludos
      JMDF

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